Hace unos días, UNEF (Unión Española Fotovoltaica) presentó su Informe Anual, un extenso documento en el que se recogen las principales cifras de 2018 y se analiza la evolución del sector fotovoltaico, que ha crecido notablemente en los últimos meses y que “pone de manifiesto que esta tecnología ya es la forma más barata de producir electricidad para aquellos países con buen recurso solar”.
Según el documento, el liderazgo de la fotovoltaica en la expansión de las energías renovables se debe sobre todo a la cada vez mayor competitividad económica de esta tecnología, que ha reducido sus costes hasta un 95% en la última década y que todavía tiene margen para seguir abaratándolos en los próximos años. Este factor ha supuesto un nuevo récord mundial de nueva potencia fotovoltaica instalada en 2018, que ha alcanzado los 94,2 GW, un 0,5% más de lo instalado en 2017 y un 31% más respecto a 2016. En el panorama internacional, que ya cuenta con un total de 480 GW de potencia fotovoltaica acumulada, China sigue siendo el motor fotovoltaico del mundo, afirman desde la Asociación sectorial.
Por lo que respecta a España, la fotovoltaica crece de la mano del autoconsumo: en 2018 se instalaron 262 MW nuevos, de los cuales el 90% corresponden a este tipo de instalaciones mientras que el 10% restante (26MW) proviene de plantas fotovoltaicas conectadas a la red. Desde el punto de vista macroeconómico, el sector contribuye al PIB con 5.119 millones de euros, un 19% más que en 2017; las exportaciones crecieron un 30%, hasta 1.522 millones y el gasto en I+D ascendió a 108 millones, un 37% más en un año. En cuanto al empleo, UNEF estima que se han generado más de 29.000, un 19% más que en el año anterior. “Estas cifras, en continuo crecimiento, ponen de manifiesto la importancia del sector fotovoltaico como sector económico que genera riqueza y empleo de calidad”, subraya Jorge Barredo, Presidente de UNEF.
El nuevo marco legislativo europeo y la normativa española también son objeto de análisis en este extenso informe. Así, destaca la aprobación de las directivas y reglamentos del Paquete de medidas “Energía Limpia para todos los Europeos”, “en las cuales se aumentaron los objetivos para el año 2030 al 32% para las energías renovables y hasta el 32,5% para eficiencia energética; se reconoció el derecho al autoconsumo sin cargos, la eliminación de las barreras administrativas y regulatorias a estas instalaciones y a los PPAs y la prohibición de la retroactividad”. En nuestro país, ha sido trascendental para el crecimiento del sector fotovoltaico la presentación del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), “que establece un objetivo de 27 GW nuevos de potencia fotovoltaica a instalar a 2030”, y la aprobación del Real Decreto-Ley 15/2018, “que ha supuesto un cambio radical de paradigma para el autoconsumo, al reconocer el derecho a autoconsumir energía eléctrica sin cargos, el derecho al autoconsumo compartido, la simplificación administrativa y técnica, la seguridad jurídica y la no retroactividad”.
Por lo que respecta al futuro, UNEF espera la instalación en 2019 de entre 3 y 4 GW de proyectos fotovoltaico. En cuanto al autoconsumo, la previsión a futuro según la Asociación sectorial es que siga creciendo a ritmo sostenido. Bajo el nuevo marco regulatorio liberalizado, sin las barreras del RD 900/2015, se espera que se instalen unos 300 – 400 MW nuevos anuales, asegura UNEF. “A este respecto, se hace necesaria la finalización de la regulación de detalle de la compensación de excedentes y del autoconsumo colectivo y la implantación del registro de autoconsumo, así como la regulación de la conexión a red para facilitar los trámites de las instalaciones de autoconsumo y, en especial, de aquellas sin excedentes.”
Estos son solo algunos de los puntos más relevantes del informe que os animamos a leer con detenimiento.